El grito
de una niña no dejó indiferente a nadie cerca de la caverna.
Era un grito desgarrador y agudo, que se
transformó en un llamado de auxilio para los hombres que pescaban cerca de
allí.
Corrieron pensando lo peor. Al entrar
vieron como una niña de no más de nueve años, era amenazada por otro, un poco
más alto, que llevaba una máscara de halloween.
— ¡Suéltala, ahora mismo!—gritó un
pescador.
— ¡Pero tío, nos jodió toda la
película!—respondió uno de los pequeños, invisibles hasta ahora, que
permanecían sentados en el suelo húmedo,
observando atentos la escena siniestra.
Los actores salieron indignados y tras
ellos una decena de niños especulaba sobre el final de “la película”.
Se frotaron los ojos al llegar a la playa
y reencontrarse con el sol. Luego, el viento los despeinó, y en un impulso
infantil donde el invierno no tuvo mayor importancia, corrieron a meter los
pies en el mar.
Amanda Luna
No hay comentarios:
Publicar un comentario