sábado, 7 de noviembre de 2015

004 EL ANCLA

004. "El ancla" por Rayén


Las tempestades eran proverbiales en Lebu; puertas, ventanas, y murallas silbaban y rechinaban días y noches enteras mientras la danza del viento,  la lluvia y los relámpagos traían los acres olores del carbón y del mar como una mezcla de perfumes diabólicos. Allí comenzó la historia del ancla. Los seis hombres de la casa abrían la puerta del sótano y sacaban la gigantesca ancla con la que afirmaban la puerta de calle que se abría una y otra vez dejando una estela de agua, viento y luz argentada en la entrada de la casa. Esa era la única seguridad contra tan dantescos torbellinos. Cincuenta años después supe de las tempestades y del ancla de mis angustiosas pesadillas, fue encontrada en los cimientos del templo que ocupa hoy el lugar del otrora hogar de mis ancestros. La vi, la toqué y recordé todo. Nunca mas me han perseguido los malos sueños.  

24 comentarios:

  1. Muy entretenido. me encanto. Me metí en el lugar y sentí mi rostro azotado por el viento y el agua. Buenísimo

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  2. Muy buen texto, felicitaciones a su autora y a la organización por esta iniciativa.

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    1. MUCHAS GRACIAS, Y QUÉ BUENO QUE FELICITE A LOS ORGANIZADORES, TENGO ENTENDIDO QUE LO HACEN "A PURO PULSO"

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  3. Me trasportaste a Lebu, cincuenta años atrás.

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  4. bellisimo! que lindo como se siente la tierra cercana del carbon !

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  5. Muy bello el texto¡¡¡¡ excelente autora¡¡¡ y muy lindo Lebu¡¡¡

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  6. Un cuento con olor y sentimiento del sur. Bellisimo

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  7. Un cuento con olor y sentimiento del sur. Bellisimo

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  8. Ivonne Maturana yo he leído harto. Lo mejor " el ancla"


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  9. Hasta que conocemos las raíces de nuestras pesadillas no podemos liberarnos de ellas. ¡Felicitaciones por el relato! Ahora las anclas se han liberado y el navío sigue su curso.

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