008 DIAMANTES

008. "Diamantes" por Nereo Welch
 

Marta estaba internada en el hospital de Lebu. Su piel avejentada se había empapado en sudor y sus ojos se movían con inusual energía debajo de sus parpados. Rostros vagos danzaban delante, hasta que de improviso sus recuerdos cobraron vida en mitad de una película antigua de colores sepia. Pudo escuchar la voz de su madre mientras cantaba,  observar la sombra de su padre recortada sobre el asfalto caliente, sentir la superficie del roquerío donde se sentaba a leer, así como también la calidez del primer beso que su esposo le robó una tarde de invierno. Todas sus memorias se barajaron en desorden mientras su propio cuerpo entraba en un estado comatoso. Durante los siguientes tres días, no hizo nada más que enfocarse a revivir su vida. Cuando finalmente expiró, los pocos que estuvieron allí, tuvieron el amargo privilegio de contemplar el retal de una sonrisa agridulce dibujada sobre sus labios ya moribundos.

007 COMO A UN TESORO ESCONDIDO

007. "Como a un tesoro escondido" por Nereo Welch

Sus ojos eran como diamantes y su piel morena estaba cubierta por un aceite aromático que embriagaba la mente de cada criatura cercana. En un par de minutos, una cantidad de observadores se había aglomerado a su alrededor, admirando su esplendor y su belleza como peces ante una carnada atractiva. La voz del visitante resonó en sus cabezas cual eco sobre un océano calmo, y con la velocidad de un rayo, mujeres, hombres y pequeños, cayeron al suelo junto a un gran estrépito. El evento no solo asoló una parte de la ciudad, sino que cada habitante de Lebu se sumió en un letargo profundo pronto a ser devorado por la creciente luz ambarina que inundó el territorio.Al presente, ninguno de sus habitantes ha logrado salir, ni nadie jamás ha entrado. Lo que sí es seguro, es que Lebu se ha convertido literalmente en el faro más luminoso de todo Chile.

006 LA GRIETA

006. "La grieta" por Cassius

Un temblor de tierra nos sorprendió a la entrada de la caverna. Habíamos oído algunas leyendas y quisimos saciar nuestra curiosidad. Nos adentramos en ella y descubrimos una grieta muy estrecha y profunda en la pared. Tal vez se había producido por el movimiento sísmico. Las señales de deslizamiento de una roca gigantesca, nos lo confirmó. Su interior estaba completamente a oscuras.

¡La linterna! ¡Dame tu linterna! La acerqué a la grieta y un resplandor procedente de su interior me cegó. Iluminé de nuevo y pude ver.. ¡¡un inmenso tesoro resplandeciente de oro y plata!! Desde el interior, alguien me arrebató la linterna.

Un violento temblor sacudió la caverna y la piedra se deslizó. Me aparté de un salto, para no quedar atrapado y caí al suelo. ¡¡La grieta había desaparecido!! Salimos muy impresionados. A nuestro regreso a Lebu, contamos lo ocurrido y creyeron que sólo pretendíamos alimentar la leyenda...

005 UN ERROR

005. "Un error" por Cassius

Se abrió el portón y la luz le cegó. Parpadeó varias veces y sintió un fuerte tirón. Saltó para no caer y pudo ver cómo el coche del que había salido, se alejaba a toda velocidad.

Lentamente, comenzó a caminar. Se sentía dolorido por la postura en la que había permanecido durante el viaje pero, a fuerza de andar, el dolor fue desapareciendo.

Tras varias horas de caminar solo, por el campo y ya al atardecer, llegó a su casa en Lebu.

El niño comenzó a gritar de alegría y le abrazó muy fuerte. Su padre los miraba contrariado desde la entrada de la casa.

Sin duda se había tratado de un error, pensó. Es imposible que se pueda ser tan cruel, como para meter a alguien en un maletero y abandonarlo a su suerte a varios kilómetros de distancia de su casa, aunque fuera un humilde perrito...  

004 EL ANCLA

004. "El ancla" por Rayén

Las tempestades eran proverbiales en Lebu; puertas, ventanas, y murallas silbaban y rechinaban días y noches enteras mientras la danza del viento,  la lluvia y los relámpagos traían los acres olores del carbón y del mar como una mezcla de perfumes diabólicos. Allí comenzó la historia del ancla. Los seis hombres de la casa abrían la puerta del sótano y sacaban la gigantesca ancla con la que afirmaban la puerta de calle que se abría una y otra vez dejando una estela de agua, viento y luz argentada en la entrada de la casa. Esa era la única seguridad contra tan dantescos torbellinos. Cincuenta años después supe de las tempestades y del ancla de mis angustiosas pesadillas, fue encontrada en los cimientos del templo que ocupa hoy el lugar del otrora hogar de mis ancestros. La vi, la toqué y recordé todo. Nunca mas me han perseguido los malos sueños.  

003 LA VERTIENTE

003. "La vertiente" por Rayén

Entonces tenían catorce años, Salgari y Verne eran sus referentes de aventuras y dramas épicos que el profesor de Castellano les había hecho amar. Así conocieron mares ignotos y tierras lejanas.   Querían ser hermanos de sangre, pero no se  atrevieron. Escucharon que si  probaban el agua de la misteriosa  vertiente del agua mucre nunca dejarían de ser amigos.  Tuvieron miedo y el gusto áspero en la lengua les quedó por mucho tiempo.  Un día Juan fue a estudiar lejos y no  regresó… Manuel sigue en su amado Lebu, Juan algún día volverá. Sí, Juan algún día volverá.

002 ESPERANZAS

002 "Esperanzas" por ECO77

21 de diciembre de 2025. La Guerra de las Américas está a punto de cumplir nueve años de iniciada. El ejército estadounidense y su legión de mercenarios han ido poco a poco perdiendo posiciones importantes. Sus suministros escasean y la desesperación se propaga rápidamente entre sus tropas. Las Fuerzas Latinoamericanas han recuperado Venezuela, Ecuador, Colombia, Bolivia y Brasil. Para que tomen Chile, les falta vencer en Lebu y Santiago.

***

Dichas Fuerzas se ubican a cinco kilómetros de la primera ciudad mencionada. La noche está fresca y estrellada. Alrededor de una fogata se encuentran reunidos cubanos, uruguayos, guaraníes… De repente, un estruendo, todo se ilumina, ataque sorpresa enemigo, sangre a borbotones.

El comandante del regimiento Galeano, después de pedir ayuda, sonríe mientras dispara. Un soldado, sorprendido con esa actitud, se acerca a la radio para reproducir la comunicación más reciente:

CUARTEL: Ya van, ¡resistan!

COMANDANTE: Muy bien, llevamos más de 500 años haciéndolo.