martes, 4 de noviembre de 2014

034 NALCAS DE LEBU


"Nalcas de Lebu" por Araw Araw




Para José Calfucoy, sus lugares de trabajo eran Grecia, Finlandia, Bulgaria, Alemania; y como yo vivía cerquita, en Frankfurt, me lo topaba con frecuencia cuando anunciaba su paso con un grito cantando a todo pulmón. "¡Nalcas 'e Lebuuuu!". Él me decía: "En estas calles de Hualpencillo siempre he encontrado buenos compradores como usted". "Hualpén -le corregía yo; ahora se llama Hualpén, don José". Me gustaba contradecirlo, por eso a veces le preguntaba: "¿De verdad que son de Lebu?" "De allá no más son, pues señor, de los propios humedales" -replicaba de inmediato. Y me recomendaba comerlas con un merquén que él preparaba según la receta de su abuela, la misma que comía nalcas para el dolor de cabeza y se teñía el pelo con nalca para tenerlo siempre negro. Fue dura aquella tarde cuando aquel camión desbocado le arrebató la carreta, las nalcas y la vida a José Calfucoy.







No hay comentarios:

Publicar un comentario