viernes, 31 de octubre de 2014

026 BÚSQUEDA

"Búsqueda" por Vicente Vazcaro



Sus ojos se perdían en el horizonte. Era mediodía y estaba vestida como una princesa. Sus cabellos bailaban a disposición de la caprichosa brisa marina, mientras su pañuelo calipso burlaba sus hermosas manos al tratar de atraparlo. Sé que me espera, que me ha esperado por años, más nunca estuve tan aterrado y cobarde como hoy. Miro a Lebu, mi único compañero en mi desdicha diaria, quien recostado a mi lado me mira con la humildad de quien ha dado todo y no puede dar más. Sé que es tiempo, siempre lo ha sido, pero nunca como para un cobarde como yo. Me levanto y camino en dirección a ella. Adriana siente mi presencia y me mira, me reconoce como quien ve con misericordia a quien no sabe cómo pedir perdón. Veo en ella el antiguo dolor, ella ve con perdón a quien la abandonó cuando más le necesitó...









miércoles, 29 de octubre de 2014

025 TARDE A LA CITA

"Tarde a la cita" por Niut Bonsái


Desde el mes pasado que no lo veía, y ese martes él no tenía clases entonces decidió viajar de Lebu aquí a Tomé para que nos viéramos. Eran casi las doce y yo estaba en recreo cuando me llamó y dijo que vendría, grité como una loca que lo amaba por el teléfono y corté. Eran las tres y no me llamaba, pero nos juntaríamos en el lugar de siempre así que al toque de timbre, tres y media en punto y salí disparada al paradero a esperarlo, me dieron las cinco esperando y no llegaba, fui a un teléfono público a llamarlo y no contestó. Llegué a mi casa desanimada, abrí mi cuenta de Facebook y vi como sus amigos le deseaban que descansara en paz en su muro.





024 SE SUPONE

"Se supone" por Niut Bonsái


Hoy en la noche iré a su casa, no importa que tenga que cruzar Lebu entero para poder verla otra vez, ya todo terminó hace más de ocho meses, pero el sentimiento sigue. Entré a la casa y todo estaba igual que siempre, pero ella me recibió fríamente y de su pieza salió un tipo, la besó en los labios y se supone que es fácil para mi repetir lo bien que me ha ido desde ese último adiós.



023 CHAO


"Chao" por Niut Bonsái


Con 18 años, el niño conflictivo de la casa ya se marcha, adiós mamá, ahora Lebu es mi casa.











sábado, 25 de octubre de 2014

022 LA HISTORIA SIN TERMINAR

"La historia sin terminar" por Anónimo



Entonces se escuchó un grito y aprendí, a mi a Lebu, ante la sorpresa que viajar es jugar al olvido y eso es lo que deseo, olvidar los últimos meses.

Un viajero siempre sabe donde está la puerta del autobús que día a día le traslada al trabajo y yo ahora me siento desorientado porque he pasado de viajero a turista, sin un reloj que me marque las horas.

Levanto la mirada del diario y miro a la anciana que dormita a a mi lado, y me sorprendo cuando al mirar hacia afuera se confunde su imagen reflejada en el cristal con la mía.

Viajando se aprende a decir adiós y esa es la palabra que sale de mis labios cuando abandono el autobús, la que flota al llegar al bloque de apartamentos y entro en el mismo cerrando con suavidad los cerrojos, con la ilusión de un nuevo día. 





021 SIN MIRAR ATRÁS


"Sin mirar atrás" por Sofía Samadhi



El improvisado cartelito que el viento agitaba estrepitosamente en esa pintoresca estación de ferrocarriles decía: "De Lebu a Los Sauces".

No lo pensó dos veces y se fue.

-Me bajo en esta estación, gracias.

Con la mirada perdida en sus desolados recuerdos, bajó y no miró atrás, siguió avanzando, tomando con entereza su liviano y a la vez pesado equipaje y era tan hermoso el paisaje de libertad que sus ojos contemplaban, que decidió no volver el rostro a su cruel pasado nunca más.





viernes, 24 de octubre de 2014

020 ULTIMÁTUM

"Ultimátum" por Fran Vouillat



Pasaste veinte años ahogado en alcohol; mientras yo criaba hijos, y trabajaba, arrastrándote.

Decidí irme de Lebu.

Elige: tu familia o el frasco.

Esa noche, él dejó el trago.




jueves, 23 de octubre de 2014

019 CRÓNICA

"Crónica" por Mirage




Escucho los gritos de horror, todo mi ser se mueve y acelera el paso.

A medida que me voy acercando veo como pasa Lebu ante mis ojos como mancha de una amigable ciudad.

Un grupo de personas se lamentan de algo.

Otro grupo sólo observan inmóviles.

Cuando intento pasar, un hombre me detiene y me saca del lugar. Logro zafarme de ahí, comienzo avanzar.

Me tiritan las piernas, diviso una mancha roja y muerte a mi pesar.

Al llegar reconozco los ojos, el cabello y la camisa que mandé a lavar este día.

Es mi propio cadáver que yace inerte.

Se desangra...

No puedo dejar de mirar.




domingo, 19 de octubre de 2014

018 ABSORTO

"Absorto" por Damián


He visto amigos aspirar hasta su alma en locales muertos de humo y fermentación. He visto que su abstracción de la realidad es más confortable que la vida misma. “Es más bello morir como un buen hombre que como un monstruo ajeno a su entorno” me dijo una noche mi viejo amigo, aturdido con la pasta base y tumbado al costado de un botecito en aquella caleta de recuerdos de Lebu. Al cual  observaba y no veía más que un hombre alejado de parámetros y estándares comunes. Esos que nos cuadran en un círculo de convivencia lineal y que restringe la demostración exagerada de las emociones para no invadir el espacio síquico del otro.

Pasividad individualista de la que huí esa misma noche junto a mi viejo amigo, elevados por el efecto del humo abrazador y cariñoso de la hierba y los químicos.

017 LEBU


"Lebu" por Lalatia


-¿Cómo le vas a llamar? -le preguntó su vecina.

-Le llamaré Lebu, como una ciudad de Chile -respondió Eva-. Estuve allí hace años y me maravilló.

Eva es una mujer de setenta años que vive sola. Nunca pensó en responsabilizarse de un perro, pero este cachorro que encontró la noche anterior, escondido detrás de un cubo de basura, sacó a la luz su parte más tierna.

Lebu la miraba con sus ojos marrones y tiernos, moviendo su colita de alegría.

Eva supo que se quedaría con él para siempre, comprendió lo que  tantas veces le habían contado de lo increíble que es tener un perro y se sintió muy feliz.



sábado, 18 de octubre de 2014

016 A PUNTO DE SECARSE



"A punto de secarse" por Carlos Hennen


Arrugado como un fruto pútrido, con dos ojos defectuosos y unos siete huesos blandos: así me encuentro yo. El mismo poeta que recorría las húmedas calles de Lebu, aferrado a la suave mano, de una joven veinteañera, hoy recorre los laberínticos pasillos de su hogar, aferrado al torso, de un rígido bastón.
A excepción de ayer, claro, cuando envuelto por un éxtasis casi dionisíaco, salí de mi hogar y con las dificultades de una persona de ocho décadas, escapé en dirección a la costa. Una vez allí boté el bastón, toqué con mis pies resecos la arena y suspiré. El entorno me dio la impresión de que había retrocedido en el tiempo, mas yo seguía igual. Por lo que exilié mi mirada al final del resplandeciente mar de Arauco, pero sólo vi a la eternidad, riéndose de un caracol, a punto de secarse.






domingo, 12 de octubre de 2014

015 LUCES EN LEBU






"Luces en Lebu" por Tejedora de sueños


Un sabio que habitaba en Lebu reunió a sus discípulos para impartir una charla, contando una leyenda nacida en las entrañas de Lebu.
-"Hace muchos años en aquellas montañas, reflejando su belleza en el cielo, unos hombres se quedaron encerrados en una gruta donde habitaba la oscuridad. Prendieron un mechero pero la llama se esfumó. Reflexionando salió una idea compartiendo con sus compañeros.
-"La luz embarga nuestro cuerpo, si nos reunimos traspasemos esos detalles anunciando amaneceres de claridad."
Así se hizo renaciendo la ansiada luz.
Al acabar el silencio embargaba a esos muchachos temiendo preguntar.
Uno alzó la voz.
-"Maestro ¿Pero qué nos quiere transmitir esta fábula? ¿Qué aprendemos de ella?
Éste respondió: 
-"Nos muestra que nuestra luz se apagará si no la compartimos con los demás perpetuando en nocturnidad. Pero si nos damos a los demás además de relucir más no acabando jamás."
Lebu encontró el tesoro más preciado llamado compartir.


viernes, 10 de octubre de 2014

014 ATESORAR LA HISTORIA

"Atesorar la Historia" por El Procónsul


El grupo de amigos planeaba sus vacaciones, todos buscaban un sitio bonito donde pasar unos días de verano y la idea de vivir "la aventura", en toda su extensión, les resultaba fascinante.

Algunos, los más intelectuales, recordaban de sus clases de filosofía la célebre "Alegoría de la caverna" de Platón, donde se planteaba que la realidad que vemos no es la realidad, sino una copia defectuosa de la misma; entonces, para poder conocer la verdad hay que salir de la cueva.

-¿Y si hacemos eso? Sugirió uno de ellos. Estoy seguro de que las cosas están ahí, sólo hay que saber buscarlas, pero en vez de ir afuera de la caverna propongo entrar en ella, entrar para hallar el tesoro que desde hace casi doscientos años permanece oculto en alguno de sus recónditos pasadizos.

-¿Vamos? Lebu nos espera.











013 EL REINADO DE LEBU

"El reinado de Lebu" por Tejedora de sueños


Un humilde plebeyo escuchó que la princesa de Lebu buscaba pretendiente para contraer matrimonio convocó un evento. Todos los nobles de Lebu.

La princesa pasó por delante de todos preguntando porqué deseaban ser rey, cuando se acercó al plebeyo ella le dijo:

-"¿Y tú?"

Respondiendo

-"Mire siempre estuve enamorado de usted cuando vi el anuncio atreviendo a venir".

Ella dijo:

-"¿Qué estarías dispuesto para conquistar mi corazón?"

-"Alteza estaré durante cien días bajo su balcón simbolizando mi fortaleza."

-"Está bien, si lo consigues serás el futuro rey."

Pasaban los días sufriendo las inclemencias hasta que se dio cuenta que aquella persona no tenía corazón así que cuando llevaba 99 días sin dar explicaciones abandonó.

Paseando alguien le preguntó:

-"¿Por qué has abandonado cuando sólo quedaba un día?"

Su respuesta entre lágrimas fue:

-"La princesa no me ha perdonado ni un día sabiendo el sacrificio. Yo la sigo amando pero ella no se lo merece."



                           

012 EL DUENDE MAXTIRCUS

"El duende Maxtircus" por Axarcol


Cuando ves por primera vez un duende: e mecanismo de defensa física se te dispara automáticamente, calculando los riesgos posibles que se avecina, con objeto de adelantarse a los conocimientos y prevenirlos, tratando de que sean lo menos dañinos posible. Es lógico que el cerebro ponga a todo el organismo en situación preventiva -soltando una fuerte descarga de adrenalina-, como prevención y preparación inmediata, para soportar un acto peligroso o de riesgo, -cualquier prevención es poca- ante un riesgo, del que no sabemos calcular la intensidad de sus consecuencias vitales. Dice el refrán. "es preferible prevenir que curar..., o toda prevención es poca..."
Afortunadamente, Maxtircus tenía muy buenas intenciones y resultó ser un gran amigo; pues lo que él pretendía es llamar mi atención para que visitase la ciudad de Lebu las próximas Navidades.






011 SEÑOR DE LAS OLAS

"Señor de las olas" por Eleonor Wers


Yo soy conocido como el señor de las olas, y en Lebu me siento en casa, con olas maravillosas donde experimentar la verdadera existencia en cada cubo en cada nueva explosión en el mar me entero de que este lugar es incluso una escuela de vida donde surfistas de todo el mundo se reúnen en Chile para honrar la acuarela de vida que se hace en la sombra de la mar. Gee, amigo, lo suficientemente estancamiento y vienen a conseguir un súper turbo con nuestra clase aquí Lebu, porque si quieres navegar y ver la belleza de la vida ¡este es el lugar adecuado para estar!





010 LA IMAGINACIÓN y EL AIRE SALADO

"La imaginación y el aire salado" por Eleonor Wers


Yo soñaba con toros, que venían a mí, yo no sabía qué hacer, sólo gritaba el nombre del lugar donde pasé mis últimas vacaciones de colegio: ¡Lebu! Como una palabra mágica cuando el Capitán Marvel dice Shazam y se convierte en superhéroe, yo estaba en un lugar maravilloso, que vive una época de canciones de amor, estaba muy lejos de La habana, ahora que estaba de vuelta a un lugar donde podía. Vete en paz, escucho el gran sonido del mar y también disfrutar de las aves que vuelan y deleito turistas desprevenidos... Juanito me llamarás, y yo soy un estudiante de medicina en Cuba, a menudo me pierdo en los ensueños, y algo me dice que una vez fuí un chico chileno que se perdió en la máquina del tiempo, motos de nieve y coqueta en Lebu, la tierra donde la fantasía se convierte en realidad y muy hermosa.







009 LEBU, MARAVILLA DE DIOS EN LA TIERRA

"Lebu, maravilla de Dios en la tierra" por Eleonor Wers


Cuando ejecuto el Lebu arena me siento más libre, me siento un ángel ganando fuerzas para volar aún más lejos... cuando pienso que mi trabajo me va ahogar en hojas y más hojas, miro hacia el mar y no pensé dos veces, solo voy a correr por la playa, respira e aire fresco y oler el aroma de este lugar bendecido por Dios, sólo aquellos que han estado aquí sabe de lo que estoy hablando... aquí, el tiempo del aire salado y amor hablan más fuerte, aquí el tiempo del aire salado y amor hablan más fuerte, aquí el tiempo de vida transcurre en armonía con la naturaleza... estoy aquí más que soy un escritor, periodista, surfista y amante de la vida en esta comunidad, vivo en Chile con más naturaleza y paz.





008 EL MAGO y EL CAMINO

"El mago y el camino" por Saetados


Un mago vaga por un monte de palabras cerca de Lebu. Mira a su alrededor y sólo ve palomas ciegas, plumas que viajan en el viento y caen presurosas en un mar de hojas secas.

Con sus manos abre el aire haciendo la señal del crepúsculo sobre su pecho. Siglos lleva andando y desandando el mismo sendero interminable y húmedo. 

Pese al tiempo, nunca mira atrás, nunca pierde de vista la luz que lo guía desde la otra punta del camino.

Más tarde cuando una luz se enciende, se pone de pie y sigue; recogiendo colores, miradas, juegos y millones de cosas de los árboles.

El mago guarda en su morral todo lo que puede y sigue despacio.

Mientras un pájaro grita desde lo alto: "...Memoria, memoria..."











miércoles, 8 de octubre de 2014

007 PERDIDOS EN EL BOSQUE DE CHILOÉ

"Perdidos en el bosque de Chiloé" por Pedro Hood


Estaba oscuro, húmedo y se escuchaban las hojas crujir, mi hermano y yo habíamos ido a mi casa en Chiloé por tres semanas. La casa tenía un bosque muy grande que nunca habíamos visto, (aunque creo que en otros lugares como Los ángeles o Lebu debería haber bosques parecidos).

Un día mi hermano Santiago y yo decidimos ir y explorar ese bosque, le preguntamos a mi Papá si nos quería acompañar, él dijo que en un rato más. Santiago y yo nos encaminábamos hacia el bosque y nos equivocamos de caminos, llegamos a un círculo que tenía muchos caminos para los lados y ninguno se acordaba por cuál habíamos venido y nos perdimos. Intentamos trepar los árboles y ver hacia afuera pero no pudimos, le gritamos a mi Papá para que viniera  pero no escuchó, luego atravesé los árboles y logramos salir. Desde entonces ya no me gustan tanto los bosques...






006 EL VIOLINISTA DE LEBU


"El violinista de Lebu" por Tejedora de sueños


Aquel violinista se encontraba en la ciudad de Lebu siendo observado por sus ciudadanos reconociendo un don sobrenatural escondido en aquel violín. Comenzó a tocar naciendo notas entre sus dedos dibujando una melodía maravillosa flotando en el aire. De repente una cuerda se rompió.

Un director de orquesta paseaba por las calles de Lebu deteniendo el tiempo porque parecía que todos dormitaban. Mientras tanto el tocaba cuando todo regreso a la normalidad. Enmudeció las calles frías descubriendo otros sonidos desde las entrañas de aquella ciudad. La desgracia cayó sobre él debido que su joya más apreciada quedando con una sola cuerda. Su rostro pálido renaciendo tocando unos sonidos donde aquel público urbano elogiando con aplausos acompañado con lágrimas emotivas. Alcanzó la gloria agrandando su gloria. La gente se marchó reconociendo que el arte se puede encontrar en huellas tatuadas desde la humildad.

Abandonó aquella ciudad embelleciendo música.


005 MANUSCRITO EN EL HALLEF

"Manuscrito en el hallef" por Llatha Yaku


Luego de su hallazgo, el científico sajón remontó el Pacífico hacia el norte, y acaso por una señal del destino o la profunda transparencia de la brisa, decidió quedarse en Lebu. Acampó cerca del río y continuó con sus anotaciones:

"El manuscrito hallado en la proa carece de rasgos que puedan ser avalados con la ciencia de Europa. Su soporte es la corteza de algún vegetal de la zona, que aún no se ha identificado. En cuanto al artefacto, se trata de una embarcación precaria, hecha de madera, cosida con fibras vegetales, que podría resultar útil para conocer la edad del mundo".

Así fue como el hallef fue depositado en el Museo Británico.

Nadie pudo explicar cómo, no bajo qué efectos, la nave retornó sin tripulantes a las coordenadas de sus aguas nativas, de donde -como sí saben los yamanas- entran y salen naves desde el principio de los tiempos. 








004 LA FURIA ESPAÑOLA

"La furia española" por Anónimo



Martín de Espinosa quiere morir: el dolor le resulta insoportable. Cuando diez años atrás embarcó en Sevilla, no imaginó que todo pudiera acabar así. Ha matado salvajes en las selvas del Alto Perú y logrado alguna cicatriz, pero ni una onza de oro. Martín sólo ha sido feliz con Illari, la esclava india que cada noche, invariablemente, trataba de morderle. La vendió a un regidor extremeño cuando abandonó Lima; ahora lamenta no haberla matado. Chile fue su última esperanza, pero los araucanos no han resultado ser tan sumisos como otros indios: ni piden ni dan cuartel. Martín ha sido apresado en un sitio que sus captores llaman Leufu o Lebu. Sus compañeros fueron afortunados: los araucanos los degollaron rápidamente. Por alguna razón, han decidido deleitarse torturando a Martín: le están matando como él, en su infancia, mataba a los cachorros de perro y gato. Quizá se lo coman también. Ojalá revienten. 



martes, 7 de octubre de 2014

003 LA VIGILIA DEL GENERAL


"La vigilia del General" por Llatha Yaku



Es de noche en Lebu. El anciano vuelve a escuchar que su tierra no es su tierra, que su dios, no es su dios.

Que para salvar a su pueblo, debe respetar las leyes...

Pero las leyes, ya están escritas desde hace siglos en este suelo.

El general ordena el arresto del cacique. Esperará el amanecer para ejecutarlo. Ya están instruidos los hombres que han de parlamentar nuevamente con los infieles. Y esta vez, será la última. El territorio entrará en la civilización, aunque no quede piedra sobre piedra.

Ahora, sostiene su arma: un pequeño libro forrado en cuero. Lo abre al azar, alumbrándose con una vela. "No cambies un límite antiguo; no te apoderes del campo de los huérfanos". Lo cierra violentamente y se queda mirándolo, como quien mira a su verdugo.

Por primera vez, teme que llegue el alba.


002 NGENECHÉN y EL PROFETA



"Ngenechén y el Profeta" por Llatha Yaku


El Señor de la Tierra caminaba por el cerro cuando en Lebu comenzó a llover. Vio que la lluvia traía su color más antiguo; avanzó entre las piedras hasta llegar al hombre.

Negenechén reconoció al niño alimentado de leche cuajada y miel; al pescador descalzo en la orilla del río...
Desenclavó carne y huesos. Devolvió a las zarzas las espinas. Entonces, la lluvia se hizo grávida, y ascendió sus aves, hasta alcanzar ese color sagrado que acaba en cordillera.

-¿Conoces a mi Padre? -preguntó el hombre.

-Lo que conocido por ti... por lo que has sembrado... eres un hijo digno de esta Tierra... los hombres, ya aprenderán...

-Los seres humanos ya no creen que mi Padre sea un dios... tal vez ahora sí pueda comunicarme con ellos...

Cada tarde, el cerro se vuelve a cubrir con los pájaros del milagro.








lunes, 6 de octubre de 2014

001 EL ALMA OSCURECIDA

"El alma oscurecida" por Lord Orking


Salía del colegio de Lebu, ya era algo tarde, pero cuando ya había emprendido un rumbo constante lo vi, era una biblioteca que nunca antes había visto, era hermosa casi por poco hubiera sido una mansión con un estilo victoriano, mis ojos no lograron seguir su rumbo y mis impulsos más recónditos me obligaron a entrar, fui caminando el lugar tenía un toque lúgubre, algo empolvado pero aún así encantador, fui caminando tranquilamente cuando unos pasos más allá había un pasillo entonces empecé a caminar por aquel lugar pero no logré ver nada, todo empezó a oscurecer y los libros caían como gotas de agua cuando me cayó uno en la cabeza dejándome inconsciente. Al despertar me encontré en otro salón con, sólo oscuridad, una oscuridad de la cual jamás pude escapar, y todavía sigo aquí ya rendido a no poder ver más la luz.